El empaque y embalaje de mercancías son clave para su comercialización. Deben mostrar las características de los productos, sus cualidades y atributos, para permitir a los clientes potenciales tener más información sobre ellos y tomar una decisión de compra inmediata.
Un sistema de empaque sirve para facilitar el acopio y clasificación de mercancías para su envío, preservándolas de riesgos físicos o ambientales durante el almacenamiento y transportación. Además, debe motivar al consumidor a adquirirlo, al garantizarle que el producto se encuentra en las mismas condiciones de calidad que tenía al momento de su recolección o fabricación.
El empaque tiene varias funciones específicas y se debe ser cauteloso a la hora de elegirlo, pues debe cumplir con ciertas características y no todos los productos pueden contenerse en el mismo tipo de empaque.
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Características de los empaques
A continuación, te dejamos una guía rápida de los aspectos que debes considerar a la hora de elegir el empaque para tus productos:
Contener: El empaque debe tener una capacidad específica para que el producto se encuentre bien distribuido sin deformar o alterar sus condiciones.
Compatibilidad: El empaque debe ser compatible con el producto para evitar transmitir aromas o microorganismos que puedan contaminar la mercancía, debe ser apropiado para la naturaleza del producto.
Retener: El empaque debe mantener intactas las características del producto, se debe utilizar suficiente material de amortiguación, asegurando que el contenido no se mueva. Existen diversos materiales como plástico burbuja, espuma amoldada, divisiones de cartón corrugado, película plástica encogible, etc.
Práctico: EL empaque debe facilitar el manejo al comerciante y al transportista, así como ser de fácil armado, rellenado y sellado.
También se deben tomar en cuenta algunos aspectos para los productos delicados o perecederos como: separar, aislar, amortiguar, fijar, sellar, etc.
El mejor embalaje será siempre diferente para cada producto, dependerá tanto de sus características físicas como de su fragilidad, tamaño y vida útil, entre otras características.
El objetivo de crear un sistema adecuado de empaque y embalaje de mercancías, es lograr un vínculo comercial permanente entre un producto y consumidor, lo cual sólo se puede conseguir, haciendo llegar el producto en excelentes condiciones.
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